jueves, 13 de noviembre de 2014

El mismo ruido

Uno de los peores momentos de mi vida fue cuando me di cuenta de que la soledad no solo era una opción para poder estar conmigo misma, sino que era una simple constante en mi vida, y que no importaban mis orígenes, pues iba a tener que lidiar con la situación presente sola, mediante ridículas decisiones diarias.






Pendientes como futuros temibles
se agazapan los minutos, captando mi atención,
mi aleteo pausado,
convirtiéndolo en fuego cálido de las entrañas terrestres,
haciendo que acuda el tambor
el sonoro e inesperado ruido del grito,
la risa que nunca advertí poder percibir,
y recuerdos que vienen siguiendo
al ruido y al desecho: los todavía ausentes olvidos.

https://www.youtube.com/watch?v=Qs6Rmq2FZOU




Me gusta la idea de que el olvido sea parte de la vida, y un trozo de vida se vaya con el olvido.

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